La maternidad tiene un efecto humanizador: todo se resume a lo esencial. No es ser creadora de vida, sino la vida deseosa de sí misma. Sin embargo, esta elección no es sino una incógnita para la mujer. ¿Por qué rehusar una vida propia después de dar otra?

En su VII edición, el proyecto “Criança Mútua” by Mamalyona refuerza el interés en dar cabida a la necesidad de madres jóvenes de conciliar la maternidad con el desarrollo personal y profesional. El Grupo ABD, (Asociación de Bienestar y Desarrollo) y BAU se hermanan una vez más para embarcarse en un proceso de emprendimiento colectivo, mientras continúan brindando atención y cuidado a la crianza. “Mamalyona”, impulsado por la búsqueda de equidad y desarrollo integral, se erige como un ejemplo inspirador de cómo las mujeres pueden empoderarse y trascender las limitaciones impuestas por una sociedad heteropatriarcal, encontrando un espacio de crecimiento y realización tanto personal como profesional.

La colectividad se manifiesta como la parte troncal del proyecto. No es la búsqueda del empoderamiento y la conjunción materno-profesional desde una visión efímera, sino desde un espacio para compartir ilusiones y retos que puedan transcender y perdurar en las propias vidas de las mujeres que constituyen “Criança Mútua”. Desde BAU, mediante talleres y cápsulas, se aprende a diseñar productos textiles, estampación, serigrafía, entre otras prácticas artísticas y creativas. ABD se posiciona en la gestión del cuidado y la conciliación, la comunicación, la economía social y la comercialización.

El proyecto llega a su fin este viernes 12 de abril. Se celebrará, en la Sala Polivalente de BAU, un acto en el cual las “mamalyonas” recibirán diplomas que certifican su valiosa participación y afianzamientos alcanzados a lo largo de este curso. Así, “Criança Mútua” no solo es un proyecto, sino un testimonio elocuente de cómo la determinación y el apoyo mutuo pueden transformar vidas y abrir caminos hacia la realización personal y profesional, demostrando que dar vida no implica renunciar a vivirla plenamente.